El A3 Sedan, fabricado en Hungría, se incluye en la gama A3 europea a modo de refuerzo. La realidad es que fue inicialmente pensado para los mercados estadounidense y chino, muy adeptos de las clásicas carrocerías de tres cuerpos.
La base técnica es la del A3 Sportback de 5 puertas. Conservando la batalla de 2,63 m, el A3 Sedan crece hasta los 4,45 m de largo, frente a los 4,31 m del Sportback. La principal ventaja de esta variantes es, lógicamente, un importante volumen de carga, el maletero pasando de 380 a 425 litros.
Estéticamente, no hay error posible es un Audi A3 y aunque podría parecer que muchos elementos son comunes entre A3 Sportback y Sedan, en realidad el A3 Sedan se limita a compartir con sus hermanos de gama los faros, la calandra y los retrovisores. Absolutamente todo el resto de la carrocería es específica al A3 Sedan. Incluso las llantas opcionales de 19 pulgadas que equipaban nuestra unidad de prueba son específicas a la berlina.
La estética es algo subjetivo y sujeto a discusiones, pero he de reconocer que aún haciendo gala de un clasicismo típicamente Audi, el A3 Sedan luce un diseño agradable. Y más con el pack S Line de la unidad que probamos. Es un modelo armonioso, elegante y sin estridencias.
Si bien la carrocería de la berlina no comparte casi nada con los otros A3, no ocurre lo mismo en el interior. El salpicadero es idéntico al de los dos otros A3 de la gama. Nos encontramos con la misma pantalla táctil retráctil, el mismo diseño depurado y la excelente calidad de presentación del habitáculo. Es pronto para decir si los plásticos de esta generación serán duraderos o no, pero en calidad percibida (tacto y presentación), Audi sigue siendo la referencia.
La habitabilidad en las plazas delanteras no varía con respecto a los otros A3 (amplia y cómoda), sin embargo en las plazas traseras la cosa cambia. La batalla entre A3 Sportback y Sedan es idéntica por lo que el espacio reservado para las piernas de los pasajeros traseros es también similar; aquí no hay sorpresa. Sin embargo y a pesar de una carrocería aparentemente clásica, la altura en las plazas traseras es inferior a la del Sportback. Si mides más de 1,80 m, no irás cómodo detrás.
Es algo que uno esperaba encontrarse en el Mercedes CLA, y así fue, pero no en el A3 Sedan. Frente al CLA, el Audi propone un acceso más fácil a las plazas traseras (sin riesgo de darse con la cabeza en el techo al entrar), pero también un espacio para las piernas inferior al propuesto por Mercedes. Los 6 cm más de batalla que propone el CLA son finalmente una ventaja frente al Audi A3 Sedan. Finalmente, el que parecía tener una carrocería menso práctica, resulta ser el más amplio.
Incluso en volumen de carga, el Mercedes se impone. Con 425 litros frente a los 470 litros del CLA, el A3 Sedan sólo puede ofrecer una abertura más ancha lo que facilita la carga. En ambos casos, el umbral de carga me pareció muy alto para unos maleteros tan profundos. Siempre acabo apoyándome y ensuciándome en el parachoques para enganchar al fondo del maletero la red sujeta equipaje.
Actualmente, la gama A3 Sedan se compone de dos motores gasolina (1.4 TFSI de 140 CV y 1.8 TFSI de 180 CV, siendo éste el único gasolina disponible con tracción integral) y dos propulsores diésel: 1.6 TDi de 105 CV y el 2.0 TDI de 150 CV. Es este último que pudimos probar, con cambio manual y tracción delantera (también está con cambio S-Tronic de doble embrague y en tracción integral exclusivamente con cambio manual).
La carrocería y el interior fueron sin sorpresas. Y tampoco hubo sorpresa al volante. Al igual que ocurriera con el A3 Hatchback, el 2.0 litros se muestra silencioso una vez que está en temperatura. En marcha, las aceleraciones son buenas, el motor responde con ganas y ganamos velocidad con facilidad. Este motor entrega lo mejor de si mismo por encima de las 1.800 rpm y hasta las 3.500 rpm. De hecho, incluso entrega demasiado y muy pronto. Sobre firme húmedo hay que dosificar mucho, de lo contrario los 320 Nm llegan de golpe y el ESP entrará en acción con brutalidad…y apenas nos habremos movido del sitio
En seco, la ventaja de tanto par motor es la de no tener que recurrir continuamente al cambio para ganar velocidad. Tampoco es un problema porque su manejo es fácil y relativamente preciso. Eso sí, siempre y cuando nos mantengamos en tercera y cuarta. Las recuperaciones medidas evidencian una quinta y una sexta muy largas y pensadas tanto para bajar el nivel sonoro como el consumo. De 80 a 120 km/h en 4ª esta berlina nos gratifica de un tiempo correcto de 7,4 segundos, mientras que en 5ª a ya son 9,2 segundos. Con el Mercedes CLA 220 CDi de 170 CV, con cambio automático de doble embrague de 7 marchas, el 80-120 km/h fue de 7 segundos. Vamos, que el Audi con menos potencia y un ligero déficit en par motor (350 Nm para el Mercedes) le hace frente. Con cambios S-Tronic, seguramente estaríamos hablando de un tiempo ligeramente inferior a los 7 segundos para el Audi.
A nivel dinámico, pues es un Audi, con todo lo que eso conlleva. Las suspensiones hacen gala de un gran confort al mismo tiempo que los movimientos de carrocería son relativamente limitados. La dirección, cuya dureza se puede regular en el Audi Drive Select, es demasiado ligera a mi gusto. Incluso en modo Dynamic, el más duro, considero que no es suficiente. Al igual que la información que nos llega a través del aro; casi inexistente. Aún así la dirección es precisa y relativamente rápida. El eje delantero se inscribe con cierta vivacidad en las curvas, aunque se aprecia el excesivo peso con el que tiene que cargar el A3 en las curvas más cerradas, donde pierda la reactividad que tenía en las curvas de radio medio y subvira de manera descarada.
En las vías rápidas, el A3 Sedan se mostrará casi soberbio. Es cómodo, preciso y rápido. Descaradamente es su terreno de juego predilecto. Incluso el consumo es bastante contenido. La media en la prueba ha sido de 6,8 l/100 km. Ya sé que dista mucho de los 4,1 l/100 km homologados, pero así de mal están hechas las normas de homologación europeas, no es que Audi nos engañe. (No os perdáis este artículo de Guille sobre los consumos donde nos explica el por qué y el cómo).
El posicionamiento del A3 Sedan en España es un tanto atípico. Puede ser una alternativa al Audi A4, para quien busque una berlina clásica pero no necesite la habitabilidad del A4. Frente a un Mercedes CLA no le faltan argumentos, como un mayor refinamiento de marcha, una calidad percibida superior y un precio muy inferior. Aunque nuestra unidad de prueba costaba casi 45.000 euros, el A3 Sedan 2.0 TDI está disponible desde 30.250 euros, frente a los 35.822 euros del CLA 200 CDI 136 CV y más de 38.000 euros del CLA 220 CDi 170 CV. También es cierto que el CLA ofrece más habitabilidad, más maletero y un línea infinitamente más llamativa. De hecho, la baza del CLA es su estética; es un coche que se vende principalmente por su diseño.